Estas 4 Estrategias para mejorar las finanzas personales están planteadas por economistas y expertos en la materia, son referencias para tomar en cuenta. Lo mejor: son breves, cortas y exitosas!
Es una realidad que con frecuencia el mundo atraviese periodos difíciles y complicados en materia económica. Muchos pueden ser los factores que causen inflación e inestabilidad económica. Sin embargo, estos elementos no los podemos cambiar, porque nos sobrepasa para controlarlos; pero lo que sí podemos hacer, es algo por nuestras finanzas.
El primer paso de las 4 Estrategias para mejorar las finanzas personales
Lleva un registro de tus gastos.
Anota ya sea en un Excel, cuaderno, pizarra, lo qué gastas, donde y sobre todo en qué. Ve revisando constantemente como vienes en el mes; semana a semana, te vas a sorprender de ver cuánto gastas en cosas innecesarias.
A su vez, haz un balance de tus gastos a fin de mes. Utiliza y agrupa tus gastos en diversas categorías; como alimentación, vivienda o gastos para vivir. Transporte, entretenimiento y diversión, suma el total y realizándolo constantemente cada mes. Así puedes ir haciendo una trazabilidad de los mismos y empezar a hacer ajustes donde consideres.
Ojo, no hagas trampa, porque al final te vas a mentir a ti y a tu bolsillo, así que registra siempre lo que gastes.
Punto seguido
Una vez que ya tienes el hábito de registrar tus gastos, te propongo que apliques la famosa regla del 50/30/20. Elaborada por la otrora, afamada profesora de economía, Elizabeth Warren, ahora senadora norteamericana. En la cual, nos presenta que definamos en sólo 3 categorías como vamos a utilizar nuestro dinero.
Para empezar, dividamos nuestro ingreso mensual, luego de las deducciones e impuestos correspondientes en 3 categorías de gastos. el 50% va a ser destinada a las necesidades; lo que quiere decir, a aquellas cosas que necesitamos para vivir, como el pago del alquiler, la hipoteca, alimentación, seguros médicos, servicios, como gas, agua, pago de deudas, transporte.
El otro 30% van a los decesos. Este engloba a esos gastos que son prescindibles, o no esenciales para vivir; pueden ser desde el plan de teléfono móvil, salidas, compra de ropa, suscripciones a plataformas o aplicaciones. Membresías de gimnasio, entradas para espectáculos; cualquier cosa en esta categoría se puede cortar, pero sólo depende de ti.
Por último, con el 20% restante, vamos a invertir o ahorrar, es esta categoría la más importante para nuestro futuro, así que busca ayuda de un asesor financiero, si no tienes idea de en qué invertir. O también puedes empezar a investigar y es lo más recomendable, a involucrarte y a educarte, no necesitas ir a la facultad, para ello, sólo ponerle empeño.
La regla 50/30/20, te va a permitir poder ver a donde se va tu dinero, donde tienes los mayores desfalcos, o donde ajustar. Lo bueno es que una vez que tengas precisado cuánto dinero le vas a asignar a cada categoría, es lo que se traduce como un presupuesto.
En teoría parece bastante fácil y más que puedes llegar a pensar que vas a tener que renunciar a los gustos, pero no se trata de eso sino de equilibrar nuestras finanzas, así cómo empezar a proyectar algo para el futuro.
En tercer lugar
Págate a ti mismo, primero, esto puede sonar trillado y hasta cliché, pero muchos pagamos primero todas las deudas, el alquiler, los servicios antes de que lo que vamos a destinar para nuestros ahorros. El reconocido gurú de las finanzas, Robert Kiyosaki, nos comenta que, si no pagamos primero, nos vamos a ver obligados a gestionar mejor nuestro dinero, así como a ser más prudentes con el mismo.
Finalmente
El cuarto consejo es, edúcate financieramente.
No necesitas ir a una facultad de economía o hacer un MBA, puedes empezar simplemente empezando a leer o pagarte un curso sobre el tema. Algunas recomendaciones son los siguientes libros para empezar:
“El hombre más rico de Babilonia”, “Padre Rico Padre Pobre”, “Piense y hágase rico”, “El flujo del dinero”, “Los Secretos de la mente Millonaria, “All your worth (La regla 50/30/20)”.
Ya con un poco más de conocimiento y experiencia, puedes avanzar con el reconocido libro de “El inversor inteligente”, así como “El libro Negro del emprendedor” .
Muy importante recordarte, que no necesitas un conocimiento en cálculo o matemáticas avanzadas para tener unas finanzas personales sanas o querer llevar de la mejor manera la inflación, es cuestión de mentalidad y de cómo dispones de tu dinero; recuerda que si eres empleado estás dándole a tu empleador un bien preciado que no es finito y no se recupera, tu tiempo, así como también si eres emprendedor o dueño de negocio, el despilfarro no es una opción.