En el apasionante mundo del tenis profesional, donde la tensión y la rivalidad reinan en la cancha, la película ‘Challengers’ nos sumerge en un triángulo amoroso repleto de giros inesperados. Protagonizada por Zendaya, Mike Faist y Josh O’Connor, esta cinta dirigida por Luca Guadagnino nos cautiva con su exploración de las complejas dinámicas entre tres personajes: Tashi Duncan, Art Donaldson y Patrick Zweig.
La trama se remonta a 2006, cuando Art y Patrick, dos amigos inseparables y prometedores tenistas, conocen a Tashi en una exclusiva fiesta. Desde el primer instante, quedan cautivados por la joven y talentosa jugadora. En un gesto audaz, Tashi promete entregar su número de teléfono al ganador de un inminente partido entre los dos amigos, sembrando así la semilla de la rivalidad.
Tras el encuentro decisivo, descubrimos que Patrick emerge victorioso, obteniendo el codiciado premio: el afecto de Tashi. Los dos inician una relación sentimental, mientras Art y Tashi se matriculan juntos en la Universidad de Standford, donde continúan cultivando su pasión por el tenis.
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Sin embargo, el destino tiene otros planes. Tashi sufre una lesión que la obliga a retirarse de las canchas, poniendo fin a su carrera como jugadora. En un giro de eventos, rompe con Patrick y comienza una nueva relación con Art, quien le ofrece un lugar en su equipo. Con el tiempo, Tashi se convierte en la entrenadora y esposa de Art, impulsándolo hacia el estrellato del tenis.
En 2019, Tashi decide inscribir a Art en un torneo Challenger, un evento de menor escala diseñado para que los jugadores sumen puntos antes de avanzar al circuito profesional. Allí, Art se enfrentará a su antiguo amigo Patrick, a quien no ha visto en años y con quien la amistad se ha disipado por completo.
El Clímax Intenso: El Partido Final
A medida que la película avanza, la tensión se acumula hasta alcanzar su punto máximo en el partido final entre Art y Patrick. Antes del encuentro, Art confiesa a Tashi su intención de retirarse del tenis profesional. Ante esta decisión, Tashi acude a Patrick, no solo para pedirle que pierda contra Art, sino también para tener relaciones íntimas con él.
Durante el último set, cuando ambos jugadores se encuentran en el Match Point, Patrick comienza a arrojar la pelota contra la red, dando a entender que cumplirá su promesa a Tashi y otorgará la ventaja a Art. Sin embargo, en un giro inesperado, Patrick le hace una seña a Art, insinuando que ha tenido una aventura con Tashi, desatando una nueva oleada de emociones.
Art, sorprendido y deseoso de intensificar aún más el juego, permite que Patrick anote, empatando el marcador y llevando el partido a un desempate. En una dirección frenética y cargada de adrenalina, Guadagnino nos lleva de un lado a otro de la cancha, manteniendo la expectativa sobre quién resultará vencedor.
Frente a la intensidad del momento, Art se acerca a la red para rematar, pero en lugar de eso, salta frente a Patrick. En un instante que parece presagiar un enfrentamiento físico, ambos se funden en un abrazo, como si fueran viejos amigos disfrutando de un partido amistoso. En ese preciso instante, escuchamos a Tashi gritar desde la tribuna “¡Vamos!”, mientras la cámara se detiene en su rostro y la película llega a su fin.
¿Quién Gana el Partido?
Lamentablemente, la respuesta a esta pregunta permanece sin resolverse, y esa fue siempre la intención del guionista Justin Kuritzkes y del director Guadagnino. Según Kuritzkes, la cuestión de quién gana el partido es simplemente “irrelevante”. Lo que realmente importa es que los tres personajes han expuesto todas sus cartas sobre la mesa, y eso se expresa a través del juego.
Durante el partido final, Patrick hace un gesto que les recuerda a ambos sus primeros pasos como adolescentes en el circuito de tenis profesional, cuando comenzaron a competir por el afecto de Tashi. Para Art, este momento representa darse cuenta de la relación perdida con Patrick debido a su devoción por Tashi. El abrazo entre ellos es una forma de reconciliación y de retrotraerse a aquellos años de juventud cuando su pasión por el tenis y por Tashi estaba intacta.
¿Sabía Art sobre la Aventura de Tashi y Patrick?
Si hay algo claro al final de ‘Challengers’, es que Art no es una víctima ingenua de la relación entre Patrick y Tashi. Durante su juventud, él mismo cuestionó la relación entre su amigo y la tenista, aprovechando su turno de ser “amado” por Tashi en cuanto ella rompió con Patrick.
Durante el partido final, Patrick revela a Art, de la misma forma que lo hizo al comienzo de su relación con Tashi, que se había acostado con ella. Esto lo hizo copiando el saque de su amigo, algo que repitió en su último enfrentamiento. Sin embargo, la razón de esta revelación no fue para confirmar su relación con Tashi, sino para despertar una reacción de enojo en Art y llevarlo a jugar el mejor tenis de su vida.
El Futuro Incierto: ¿Qué Depara para los Personajes?
Es posible que Patrick estuviera tratando de ganar el juego para convencer a Tashi de que fuera su entrenadora. Al mismo tiempo, Art ahora sabe lo que sucedió entre su esposa y su ex amigo, lo que podría llevarlo a abandonar su relación con Tashi, quien había amenazado con dejarlo si no ganaba. También es posible que Art decida quedarse y seguir jugando en esa relación de a tres, ya que técnicamente podemos inferir que sí gana el partido.
Para Kuritzkes, el final de ‘Challengers’ es satisfactorio y ambiguo a la vez. No importa realmente quién gana el partido o qué les depara a los personajes en el futuro. Lo que importa es que los tres han conseguido lo que llevaban buscando durante toda la película: Art ha reavivado su pasión por el tenis, Patrick ha revivido su juventud jugando con su mejor amigo, y Tashi ha presenciado un emocionante partido de tenis.
Una Reflexión sobre la Pasión y la Amistad
En última instancia, ‘Challengers’ nos invita a reflexionar sobre la naturaleza de la pasión, la amistad y las relaciones complejas. A través de sus personajes, la película explora cómo la ambición, el deseo y los lazos emocionales pueden entrelazarse de formas inesperadas, desafiando nuestras percepciones y poniendo a prueba los límites de la lealtad y el amor.
Con su dirección audaz, actuaciones cautivadoras y una trama llena de giros inesperados, ‘Challengers’ se consolida como una obra cinematográfica que trasciende los límites del deporte y se adentra en los recovecos más profundos de la condición humana. Su final abierto a interpretaciones nos deja con preguntas sin responder, pero también con una apreciación renovada por la complejidad de las relaciones y la capacidad del arte para reflejar las verdades más incómodas de la vida.